El tema: “ El Espíritu Santo en mi vida consagrada”, desplegado en subtemas diarios:
Fueron invitadas a vivir cuatro momentos de reflexión en oración diarios.
Padre Pablo, partió diciendo que “el río del amor de Dios, que surge del Padre hacia el Hijo: “Como el Padre me amó, también yo los he amado a ustedes. Permanezcan en mi amor” (Jn 15,9). Luego agregó “el río de amor de Dios, que va del Hijo hacia los hijos: “Les doy un mandamiento nuevo: ámense los unos a los otros. Así como yo los he amado, ámense también ustedes los unos a los otros” (Jn. 13, 34).
La evaluación final fue muy positiva.